¿Cómo detectar a un traductor? 25 razones… ¿para odiarte o para amarte?

¡Hola!

En primer lugar, agradezco a Irene [@IreneFV_] y Scheherezade [@Scheherezade_SL] (las creadoras) y a Darío [@dgimirizaldu] (el diseñador) que hayan tenido esta GRAN idea…

En esta entrada, voy a desentrañar ciertas verdades y circunstancias que circundan a una profesión de letras, pero no solo de los caracteres escritos va esto… Voy a ayudar a aquellos que estén perdidos… A aquellos que no sepan cómo actuar cuando lo vean… A aquellos que cuando lo oyen no saben qué decir (ni si decir algo…). Las verdades y circunstancias que se van a enumerar aquí, pueden dañar la imagen de algunos e incluso puede perjudicar a la citada profesión de letras; o no. Si alguien de fuera de la profesión sabe mirar a este artista de las letras con “buenos ojos”, puede ocurrir algo bien distinto. El profesional de las letras al que me refiero es: el traductor (ya lo decía en el título, pero, como buen traductor, me gusta una parafernalia y “enrollarme” a la hora de iniciar una entrada de blog).

Como pueden ver, la supuesta máxima institución de la lengua española, el DRAE, lo define así:

Y, como suele ocurrir en los casos de adjetivos o sustantivos que tienen verbo, hay que estar buscando más allá, pues la definición de “traductor” es escasa. Y define “traducir” así:

¿Ayuda esto a conocer a un traductor? Me parece que tenemos más de la acepción número 3 que de la 1 (casi, casi…). Así que tras haber comprobado que las definiciones no colaboran… ¿quién mejor que un traductor para ayudar al resto a saber si está ante uno?

¿Cómo detectar a un traductor? 25 razones… ¿para odiarte o para amarte?

¡Atentos! Empezamos…

Si estás con amigos y con X en una casa viendo la televisión, y de repente X exclama: “se dice hubo y no hubieron”, aunque X parezca igual de insistente en su repelencia que el avión, no hagas como Cary Grant en este video…

X es traductor, ¡te lo aseguro!

Las acciones más comunes o los encuentros sociales más cotidianos…para X son distintos. ¡Fíjate en cómo se comporta X en situaciones aparentemente “normales” para el resto!

¿Cómo detectar a X en el restaurante?

1. Si antes de entrar al restaurante, X se para y mira hacia arriba… Te preguntarás qué mira, ¿no? ¡Está mirando el cartel y no quiere entrar porque el italiano se llama ‘cHao Bella Italia’! ¿A quién se le ocurre? Con ese nombre mal escrito, la comida no puede ser buena…

X es traductor, ¡te lo aseguro!

2. Si estás con X en un restaurante y empieza a ladear la cabeza como buscando al camarero, pero no lo llama… es que se está escondiendo de él. No quiere que lo vean, porque… ¡va a sacar una foto a alguna errata de la carta!

X es traductor, ¡te lo aseguro!

3. Si estás con X en un restaurante y a la hora de hacer su pedido de la bebida dice algo extrañísimo… Y tú te preguntas: “¿Qué ha dicho? Yo he pedido una coca-cola…” X habrá pedido una Krombacher (pero lo ha pronunciado en alemán…) con lo que ni siquiera el camarero le ha entendido…

X es traductor, ¡te lo aseguro! (Y, además, estuvo de Erasmus y ahora, a su vuelta, va por ahí pidiendo todas las cervezas que probó… Dentro de las fricadas del traductor, la práctica del idioma en cualquiera de las oportunidades que tenga, es de las más preciadas.).

4. Si estás con X en un restaurante y ves que está mirando fijamente hacia la mesa y no presta atención a lo que le dices… ¡Olvídate, porque se ha ensimismado en el apasionante mundo de la lectura de ingredientes! Es que el bote de kétchup los tiene en varios idiomas… ¿cómo resistirse?

X es traductor, ¡te lo aseguro!

X suele retratarse así con la música

5. Si estás con X en un karaoke y es el único que se empeña en cantar una canción en inglés durante toda la noche en ese karaoke…

X es traductor, ¡te lo aseguro!

6. Si el gusto musical de X abarca desde Bob Marley, pasando por Elvis Prestley, hasta U2 (todos cantan en inglés con acentos ingleses distintos – esto es primordial también).  Nótese su exacerbado gusto por Muse y Rammstein (si no le gusta “Pepe”, le gusta “Juan”; ¡no falla!)

X es traductor, ¡te lo aseguro!

7. Si X tiene un gusto musical como,…demasiado inglés… Conoce grupos que no conocen ni los propios músicos… Es el rey de tendencias musicales que ni se mencionan en España y si el nombre de la tendencia lleva “indi” en él, mejor que mejor…

X es traductor, ¡te lo aseguro!

8. Si X se atreve a cantar en otros idiomas (da igual que sea suajili…porque habrá buscado significados, pronunciaciones, entonaciones, etc.) Sobre todo, en inglés… ahí es el rey. No hace como el resto… que se limita a pronunciar la última palabra de las frases de la canción. No, no, él se la sabe entera.

Aunque suceda algo como en este video…

X es traductor, ¡te lo aseguro!

Si sucede alguna de las siguientes situaciones en relación con series, películas o programas

9. Si X está viendo contigo el programa Password y, tras ver lo siguiente, exclama: “¡Así va el país!”

X es traductor, ¡te lo aseguro!

10. Si X se empecina en ver las series y las películas con esas letritas debajo…

X es traductor, ¡te lo aseguro!

11. Si X ve tantas series como dedos tiene en el cuerpo y se autodenomina “seriéfilo”… Ve series ya sin discriminar. Tan diferentes entre sí como Gossip Girl, True Blood o Modern Family (se recomienda pronunciarlas «modo traductor» para ir empatizando…)

X es traductor, ¡te lo aseguro!

12. Si hablas con X de cualquier serie y la conoce (pero no solo le suena el título, sino que conoce la productora, los actores, el guionista e incluso conoce al que sirve los cafés…) Ejemplo: «Sí, sí. Sé cuál es… he visto algún capítulo, pero no la sigo… En el capítulo 1×04 sale Matt LeBlanc, el de Friends».

X es traductor, ¡te lo aseguro!

Y así suele comportarse X en diferentes situaciones.

Batiburrillo de situaciones traducto¿lógicas?:

13. Si X está bebiendo cervezas con amigos… Lleva ya unas cuantas, pero aun así, suelta de repente un cultismo (que le hace quedar como el repelente del grupo)…

Ejemplo: «Opino que habría que pensar más y mejor: cogito ergo sum«

X es traductor, ¡te lo aseguro!

14. Si X está manteniendo una conversación contigo, y, de repente, introduce una palabra en inglés, alemán, francés, idioma Y…en dicha conversación. Por ejemplo: “¿Y si vamos hoy a la beach?” Estudios sicológicos aseveran que tiene unas ansias desmesuradas por practicar el idioma. ¡Entiéndelo!

X es traductor, ¡te lo aseguro!

15. Si X llama a sus estanterías de libros “biblioteca” y, además, en ellas tiene libros tan variopintos como estos…

X es traductor, ¡te lo aseguro!

16. Si X aparentemente no está trabajando, y, de todos modos, no sale a lo que tú ves como un fiestón un sábado, porque tiene cosas que hacer… (Traducción urgente de 5000 palabras que llegó el viernes a las 17.00 horas y la entrega es el lunes a primera hora)… Si, además, se queda en pijama de invierno… ¡sospecha! Ese se va a quedar trabajando. 

X es traductor, ¡te lo aseguro!

17. Si X habla de palabras y céntimos o de números de modelos como quien habla de banca. En realidad… no es una buena comparación, ¿no?

X es traductor, ¡te lo aseguro!

18. Si, de repente, le para un turista y en lugar de señalar a otro para que le conteste… o salir corriendo, X atiende a ese ciudadano extranjero despistado.

X es traductor, ¡te lo aseguro!

19. Si, tras atender a ese turista, ves a X con cara sonriente, como de satisfacción… Eso es que está contento por haber practicado el idioma con un nativo. «Se siente realizado»… Ya eran 3 días sin utilizar el inglés…

Así de contento estará…

X es traductor, ¡te lo aseguro!

20. Si X tiene en su CV la licenciatura de TeI, pero no es la única titulación superior que aparece. (Probablemente, su avidez de conocimientos – eufemismo de: sabelotodo o enterado – le llevó a hacer otra cosa o a especializarse).

X es traductor, ¡te lo aseguro!

21. Si X lee algo en un idioma extranjero que tú creías que era inglés y lo hace de una forma ¿rara? que no entiendes. O si X durante una conversación afable entre amigos pronuncia McDonald’s como /MACDOUNALS/ en lugar de /MACDONA/

… sin superar a lo presente…

X es traductor, ¡te lo aseguro!

22. Si ves que X por su blog, Twitter, Facebook, red social varia critica a un tal “PM”…

X es traductor, ¡te lo aseguro!

23. Si a X le gusta cocinar más de lo que podría ser habitual para un cocinero no profesional… Suele deberse, en las nuevas generaciones a que han ido de Erasmus y han tenido que aprender, al final. Como friquis… pues aprenden los platos del lugar, etc. Se les reconoce especialmente, porque pueden cocinar un plato polaco o danés, por ejemplo.

X es traductor, ¡te lo aseguro!

24. Si juegas con X al Trivial y no domina ningún color en concreto, pero acierta las que nadie se sabe. Suele reconocérsele porque se le pregunta: «¿Pero tú no sabías idiomas? ¿Cómo es que te sabes eso? Bah, te las sabes de memoria…»

X es traductor, ¡te lo aseguro!

25. En el caso de los hombres, si ves a X rodeado de 40 mujeres.

X es traductor, ¡te lo aseguro!

25 (bonus track). Si ves a X, hombre, solo con 14 mujeres tomando una caña…

X es traductor, ¡te lo aseguro!

Antes de finalizar y por si todavía no tienes claro cómo detectar a un traductor… Aquí tienes un video muy ilustrativo de la vida de un traductor de a pie.

¿Qué te han parecido las 25 razones? ¿Para odiar o para amar a un traductor?

¡Traductor, atrévete y comenta tu rareza (con su número)! O aporta tu rasgo traducto¿lógico? más inconfesable 🙂

¿Cómo creen que termina la película?

¿Así? [Suponiendo que X está entre los vietnamitas…] 25 razones para ODIARTE

o ¿así? [Suponiendo que X es Demi Moore, la alfarera…] 25 razones PARA AMARTE

52 comentarios el “¿Cómo detectar a un traductor? 25 razones… ¿para odiarte o para amarte?

  1. ¡Hola!

    Es de las entradas más divertidas que he leído últimamente. Me he reído porque me he visto identificada en muchos de los puntos que has señalado. Lo que más me ha «matado» es que mis grupos favoritos son Green Day (americanos), Muse (británicos) y Rammstein (alemanes). Sí, efectivamente coinciden con mis lenguas B y C de la carrera y no, no me había dado cuenta.

    Un saludo y no dejes de divertirnos/enseñarnos con tus entradas,

    Laura

    • ¡Gracias!

      Algunos de los traductores que conozco tienen esa combinación de grupos. Esa razón ha sido «fácil» de pensar 🙂

      Me alegro de que te divirtiese. Es bueno reírse de uno mismo.

      Te veo en las próximas entradas.

      Un saludo,
      Devadip

  2. Muy buena y muy divertida 🙂

    Si empiezo a enumerar las razones que me definen parecería que cantara los números y jugara para bingo. Yo añadiría una variante: parecer un autista por la calle, quizá inmóvil en la acera, porque has visto un cartel curioso cuyo misterio quieres desentrañar («Diría que esa preposición no va ahí», «¿Da clases de «ingles»? ¡Pues vaya!», etc).

    En fi, que yo creo que somos unas personitas muy especiales y aunque en ocasiones rocemos lo repelente, también somos adorables 😉

    ¡Un abrazo!

    • Gracias, creadora de la imagen inicial 🙂

      Estuve a punto de escribir 50 razones, pero hubiese sido demasiado denso… Tenemos estereotipos traducto¿lógicos? para dar y regalar.

      Creo que somos de los pocos que miramos durante más de 2 segundos un cartel de la calle. Aunque suele ser para corregir o reírte 😀

      Como en todas las profesiones, hay de todo, pero en cuanto a ser repelentes, si se sabe llevar, somos adorables, sí. 🙂

      Gracias por comentar también en esta entrada.
      Un abrazo

  3. Enhorabuena, nos ha encantado.

    También añadiría que los traductores solemos comprarnos camisetas con lemas absurdos en autrohúngaro antiguo, nos hacemos fotos con la Piedra Rosetta y la enmarcamos como si fuera una instantánea con Madonna, estamos al borde del divorcio cada dos meses por intentar ver Bob Esponja en versión original, tenemos las aplicaciones más absurdas en el móvil y ayudamos a nuestros amigos en cuestiones como traducir frases para tatuajes, alquilar un hotel en Prusia o comprar una camiseta por Internet que viene desde San Petersburgo, por mencionar unas cuantas.

    Ya estamos esperando la siguiente entrada de vuestro cuaderno de bitácora.

    Un saludo afectuoso.

    • Gracias por comentar.

      Me gustan las propuestas. Sin duda, también se podría detectar a un traductor por esas razones que citas.

      Me alegro de que les haya encantado. Nos vemos en la próxima entrada.

      Un saludo.

  4. ¡Qué bueno!
    Creo que voy a guardar esta entrada para enseñársela a mis amigos (no traductores) cuando me miran raro. Y es que, aunque no todas se cumplen y cambie inglés por francés cada vez que sale en la lista, me he reído muchísimo y me he sentido muy identificada.
    Otra más que se me ocurre es el momento en el que estás con un grupo de amigos, cada uno es de una nacionalidad y vas cambiando de idioma según a quien te dirijas o vas traduciendo lo que ha dicho X persona para que Y lo entienda.

    ¡Un saludo!

    • ¡Hola!

      Gracias por comentar. Reírse de uno mismo es fundamental, así que seguro que tus amigos sabrán apreciar que les enseñes cómo funcionan tus «fricadas». 🙂

      Tienes razón. Estar en un grupo de amigos en el que hay algunos de otros idiomas nos encanta 🙂 Otra razón más para detectar a un traductor.

      ¡Un saludo!

    • Seguro que muchos nos vemos reflejados en varios puntos. ¡Somos X! 🙂

      Si ves la entrada desde un ordenador, debería de verse, ¿no?

      Espero que puedas ver la entrada con los videos también.

      Un saludo.

  5. Yo también soy X, lo admito. Con lo de la biblioteca me has matado, de verdad, porque jamás hubiera pensado que era una manía de traductora, y eso que sólo tengo una estantería, jaja… pero para mí no deja de ser la biblioteca. Por añadir otra: estar borracho y cambiar de idioma… para ver cómo todo el mundo empieza a mirarte con cara de confundido. Me pasó anoche, con una copa de vino, 🙂

    • Reconocer que te identificas como X ya es un paso :).

      La razón de la biblioteca no es de las más comunes, pero sí, conozco bastantes traductores o filólogos que llaman así a sus estanterías 😀

      Gracias por tu aportación.

      Un saludo.

  6. 26.-Si sales a pasear o a tomar algo con tus amigos y ves a X prestando más atención a la conversación que tienen el grupo de guiris de al lado, y encima tiene cara de satisfacción y suelta alguna risita…
    X es traductor, ¡te lo aseguro!
    27.- Si twittea sin faltas de ortografía…
    X es traductor, ¡te lo aseguro!

    jejejej ¡ahí van mis aportaciones!
    ¡Muy buen post!

  7. ¡Lo que me he podido reír con la entrada, hacía tiempo que no leía una tan divertida!

    Como aportación, te puedo comentar una anécdota que me pasó hace algún tiempo:
    Un amigo me pregunta cómo diría yo en inglés una expresión (ahora mismo no la recuerdo), y le contesté dándole dos soluciones posibles, y el por qué de cada una, me tiré así como 20 minutos explicándoselo. Y al final, va y me dice: «Madre mía, ¡te lo has tomado súper en serio!», y la verdad es que no me había fijado, pero cuando me preguntan por un aspecto lingüístico o por una traducción, me puedo tirar horas pensando en el mismo tema, como si fuera lo más normal, mientras que para otros, no lo es tanto! 😉

    Enhorabuena por la entrada, me ha encantado. 🙂

    Abrazos,

    Laeticia

    • Hola, Laeticia:

      Gracias por pasarte por aquí a comentar (y a dejar un comentario tan bueno para mí y mi entrada :D).

      No podemos ir por ahí de «divos». Porque no lo somos. Al menos, yo no. Así que convenía escribir una entrada en la que nos ríamos de nosotros mismos (o eso me ha parecido). Muy acorde a mis «ánimo a aquellos traductores que» del Twitter, tenía ganas de que mi segunda entrada se pareciese a esos mensajes. 🙂

      Tu anécdota es habitual en nosotros. Cuando se meten en el campo profesional «de uno», y sabemos de lo que hablamos…nos lanzamos. De ahí, las caras que vemos en los otros algunas veces y que nos autodenominemos friquis. El resto de profesionales (médicos, pilotos, deportistas, etc.) también cuentan sus hazañas y despliegan conocimientos…de modo que, ¿por qué no nosotros, no?

      Gracias por tu aportación. Te espero por aquí y te leo en «Traducir es descubrir» donde escribes unas entradas muy interesantes también.

      Un abrazo.

  8. Recapitulando, me siento muy identificada con 2, 3, 5, 8, 10, 12 (11 no porque intento evitarlo, que me engancho y entonces el trabajo no sale), 15, 18, 19 y 21. El resto las comparto en menor medida aunque haya un par que, ciertamente, me parecen de lo más repelente. Ah, la 20 no la incluyo (si exceptuamos que tengo un Máster, y no del Universo) porque de momento no es un hecho, pero sí, estudiar otra carrera entra dentro de mis planes de futuro.
    Por cierto, gracias por la mención ;).

    Yo añadiría un par de características nuestras, como nuestra tendencia a comernos el coco en demasía y meternos en todos los «fregaos» posibles.

    P.D.: ¿He comentado que ya tengo entrada para el próximo concierto de Muse en Barcelona? xDDDDD

    • ¡Hola! 🙂

      Gracias por tus aportaciones y por tu completo comentario.

      Veo que, sobre todo, las razones que dicen que eres traductora van por las del restaurante 😀 (Haces bien con las series. Enganchan…)

      Seguro que estudias alguna otra carrera en el futuro. ¿Alguna relacionada con el arte? Posiblemente…

      Tienes razón. X suele pensar muchos sobre las decisiones. Diría que más de lo habitual… Comecocos andantes 🙂

      Como viste en uno de los puntos, no me extraña nada que tengas esa entrada de Muse. Seguro que muchos otros X quieren ir.

      Un abrazo y gracias a ti por haber dado la idea para crear la imagen. 🙂

      • En realidad la otra carrera que quiero estudiar es Filología Inglesa o como se llame ahora, que a la pobre siempre la andan cambiando de nombre (creo que ya lo he dejado caer alguna vez). Bellas Artes no quiero estudiar, pero hacer algún curso o grado de ilustración en alguna academia o escuela sí. En fin, tantas cosas, tan poco tiempo y tan poco dinero, jeje.

        Por cierto, en muchos de los puntos también reconozco a amigos y conocidos que no son traductores; he visto a ingenieros, historiadores, artistas, etc. caer en muchos de estos comportamientos, así que creo que no son exclusivamente propios de nosotros. Eso sí, algo tienen en común estos amigos que te digo con nosotros: son extremadamente friquis, cada uno de lo suyo, pero todos friquis.

        ¡Un abrazo! 😀

        • Sí, lo dijiste en el comentario de la anterior entrada, pero quería «empujarte» a la rama artística. 🙂 De tu primer párrafo, me quedo con la primera frase y no porque me guste, sino porque seguro que muchos estamos así.

          Por supuesto, era una exageración y una sátira. Seguro que muchos otros comparten varios puntos, pero la suma de los 25, creo que prácticamente solo nos compete a nosotros 😀

          Gracias de nuevo. ¡Un abrazo!

  9. Felicidades, una entrada muy divertida. 🙂

    Soy traductora de alemán y debo decir que me gustan Muse y que NO me gustan nada Rammstein… Es más, una conversación que he mantenido en bastantes ocasiones y que no deja de irritarme cada vez es esta:

    – ¿Así que traductora de alemán?
    – Sí.
    – ¿Te gusta Rammstein?
    – No. Me gustan otros grupos alemanes, que los hay, aparte de Rammstein.

    Me ha encantado lo del hombre solo tomando cervezas con 14 mujeres y lo de hacer fotos del menú con erratas furtivamente, jajaja.

    Añado una: si estás con una persona viendo una película doblada y esa persona esboza alguna sonrisilla de vez en cuando aunque lo que se esté diciendo no sea necesariamente gracioso, esa persona es un traductor (que en un proceso mental agilísimo ha deducido lo que el actor decía en el idioma original y ha entendido por qué se tradujo así).

    • Gracias por comentar. Me alegro de que te parezca divertida. 🙂

      Sí, la asociación Rammstein a traductor de alemán suele hacerse de manera inmediata. A mí tampoco me gustan demasiado.

      Muy buena aportación. En «esas» también nos solemos ver envueltos los traductores muchas veces. Al ver doblajes o subtítulos caemos en la trampa de ir traduciendo o corrigiendo en lugar de ver la película y ya está.

      Nos vemos en la próxima entrada.
      Un saludo.

  10. ¡Hola!
    Como estudiante (es decir, aspirante) cumplo muchas de tus razones así que creo que voy por el buen camino, jeje, me he reído mucho ^_^.

    Aquí va mi rareza:

    «X te llama a horas intempestivas o te envía mensajes con tono de urgencia para preguntarte «¿Cómo llamábais en tu pueblo a aquel/la/llos/llas pájaro/tienda/edificio/fiestas?»»

    Enhorabuena por tu blog.
    ¡Un saludo!

    • Hola:

      Gracias por leer y comentar. Dudas existenciales traducto¿lógicas? varias, como la que propones, suelen estar dentro de posibles características que distinguen al traductor. Es curioso que tú misma la llames «rareza» 🙂

      Me alegro de que te haya gustado y de que cumplas con varias razones. Como dices, eso es que vas por el buen camino 😀

      Un saludo.

  11. Yo tengo un problema enorme (y espero no ser la única) con las tildes. Si no veo una tilde donde debería estar puesta, me duelen los ojos. Mi profesora de lingüística me decía que si sigo corrigiendo a la gente me voy a quedar sin amigos…
    Muy buena entrada. Felicidades.

    • ¡Hola!

      No, no eres la única. Las incorrecciones ortográficas también duelen en los ojos. No solo las malas traducciones…

      Gracias por los elogios. Espero verte en la próxima entrada del blog.

  12. ¡Me encanta la entrada! ¡Yo soy de Muse también! Y en el karaoke soy de las que canta Bohemian Rhapsody de Queen y hasta que no llego al «Mama uhuhuhhh» nadie sabe cuál es.
    ps: Acabo de ver Embrujadas en V.O. 😉

  13. Genial entrada, Devadip. Yo, como anécdota entre otras tantas de todos los puntos que has mencionado —con más de la mitad me siento identificada— señalo que cada vez que veo a un turista algo perdido o con el «May I…» en la boca, antes de que diga nada ya soy yo la que me acerco y le acoso. XD Deben pensar que tengo problemas mentales, pero qué felicidad tengo a la hora de usar los idiomas. 😉

    Me he desternillado con lo de los gustos musicales y literarios variopintos. Yo misma he pensado alguna vez que parezco bipolar, que la gente debe pensarse que no tengo personalidad propia o algo así, porque tiendo a abarcar muchas cosas, me intereso por casi todo, y sí, efectivamente, me conozco muchos nombres rarunos de grupos, ¡jajajaja!

    La tendencia a corregir todo lo que vemos… en fin, qué te voy a contar de esta, lo charlamos día sí día también en el Twitter todos, así que… bueno, que felicidades de nuevo por tu blog y por esta pedazo de entrada, que estoy orgullosa de ti 😉 y que nos seguimos escribiendo por Twitter, ¡amigo!

    • ¡Hola, Patricia! 😀

      Gracias por volver a pasarte por aquí a leer.

      Gracias también por tus aportaciones. Como bien dices, esa felicidad tras haber hablado el idioma extranjero es incomprensible, puede, pero muy enriquecedora para nosotros. Además, no nos alegramos por haber hecho la obra social de ayudar a un extranjero (algunos, puede que sí… 🙂 ), sino por haber practicado durante un minuto y por ver que el externo nos ha entendido 😀

      Nos seguimos siguiendo, valga la redundancia – pero es literal – Y nos vemos por aquí o por allí 🙂

  14. Me alegraste el sábado, sin duda alguna :). Lo de las series televisivas, tal cual, mea culpa (ufa, ya incurrí en uno de los indicadores).

    Puedo agregar un par de situaciones (le perdí el número que corresponde):

    – Si X va al cine con un/a amigo/a (que no sabe inglés, x ej.) a ver una peli subtitulada, y 2×3 le susurra (para no incurrir en la ira de algún espectador cercano) qué quisieron decir porque en el subtítulo pusieron un disparate; o es el único que se ríe estentóreamente de un chiste o ironía que nadie más festeja en la sala porque no supieron reflejarlo en el subtítulo,

    X es un traductor.

    – Si X está en el videoclub tratando de sacar una peli y lee el resumen en la contratapa y suelta una estentórea carjacada, atrayendo así miradas perplejas y un tanto conmiserativas de otros potenciales clientes, porque advirtió que el bendito resumen fue hecho con Google Translate (u otro sistema trasnochado de TA) y no se entiende un corno,

    X es un traductor.

    Me encantó la entrada, y habrás visto por las numerosas respuestas, que quien más, quien menos, todos nos sentimos identificados con estas «deformaciones profesionales». Hasta a veces felicito a mis amistades en los cumples diciéndoles o escribiéndoles «Apio verde chu iú», para alardear de imperfecta….:)

    • Oh, me alegro de alegrarte. Que todo sea alegría 😀

      Gracias por tus aportaciones. Perfectamente podrían entrar en la lista de las características típicas de un traductor.

      Espero verte en la próxima entrada, aunque posiblemente no trate tanto de la mezcla de idiomas, sino solo del español.

      Un saludo.

  15. Pingback: A tope con los típicos tópicos « En la luna de Babel

  16. ¡Qué buen post! Me he reído a carcajadas (y sola, para variar) con todas las verdades que dices. Aún no me gradúo de traducción, pero ¡soy casi tan insoportable como si tuviera el título en mano! Jajaja. En mayor o menor medida me identifico con muchos de los puntos y por eso me resultan tan graciosos.

    Creo que los que no son X nos tienen una relación de «amodio» 😉 Nos odian cuando nos ponemos, según ellos, latosos, y nos aman cuando resultamos ser una fuente importante de información. No somos divos, pero sí indispensables y, más aun, si somos adorables 😀

    P. D.: ¡Buena elección de vídeos! 🙂

  17. ¡Hola!

    Me alegro de que te haya hecho reír. Pretendía que nos riéramos todos de nosotros mismos. Nunca está de más.

    Todos tenemos nuestras manías. Seguro que los de otra profesión también tienen una u otra, pero lo importante es reconocerlas para que sepas el nivel friqui que tienes.

    Gracias también por la elección de los vídeos. De hecho, fue lo que más costó de toda la entrada 🙂

    ¿Te veo en la siguiente entrada del blog? Eso espero.

    Un saludo,
    Devadip

  18. Jajajajaja Qué bueno, por favor, ¡me he reído muchísimo! Luego se lo enseño a mi novio y a mi familia jaja Llego tarde pero aporto alguna cosa:
    – Si viajes a donde viajes X puede hacerse entender con cualquier persona porque antes de ir ha estudiado brevemente el idioma de ese país, es traductor.
    – Si X escucha a dos personas hablando en un idioma que no conoce y es capaz de decirte qué idioma es por algún rasgo concreto (da igual que sea húngaro o suajili), X es traductor.
    – Si X es capaz de recordar cómo se escribe exactamente una palabra de un idioma que no conoce y que ha leído sólo una vez, X es traductor.

    Tengo un ejemplo mix de los dos últimos: estando de Erasmus, un grupo de amigos estábamos viendo una película que habíamos descargado y de repente salieron unos subtítulos muy raros y luego desaparecieron. A mí me dio tiempo a pillar una palabra y dije que eso era finés. Claro, todos se rieron pensando que era una broma pero mi orgullo me hizo pedirles que volvieran atrás y que buscasen la palabra en internet. Efectivamente, era finés (no lo había visto escrito en mi vida pero como es similar al húngaro y ese idioma sí lo había visto, lo deduje).

    Este tipo de cosas hacen que a veces caigamos mal jajaja

    P.D.: otra cosa por la que nos caracterizamos, creo yo, es porque somos muy eclécticos en cuanto a literatura, música y cine…

    • ¡Hola!

      Gracias por pasarte a leer la entrada. Parece que te ha gustado así que mejor que mejor 🙂

      Nunca es tarde si la dicha es buena, dicen… No es tarde para aportar, todavía menos si son tan buenas aportaciones 😀 ¡Los casos que proponen podrían entrar en la lista perfectamente!

      – Ver palabras en otros idiomas y alegrarte porque sabes que se trata de croata, checo o finés… ¡Muy de X! 🙂

      Es cierto que hacen que caigamos mal, porque somos un poco enterados/nerds, en general. Como X hay que saber medir cuando sí y cuando no. Eclecticismo sí, pero no en a toda hora (o «súfrelo» en silencio :D)

      Te espero en la próxima entrada (que lleva en construcción casi un mes ya…).

      Un saludo,
      Devadip -> @TraductorJur

  19. Pingback: ¿Cómo detectar a un cliente directo? Algunas razones ¿para odiarlo o amarlo? | TraducThor, la fuerza de las palabras

  20. Pingback: Historietas de mi día a día © | Algo más que Mujeres

Replica a devadiprivero Cancelar la respuesta